Si existe una verdura con mala prensa, es sin duda la berenjena. Los dichos populares y algunas falsas creencias la dejan en muy mal lugar.
"La berenjena para nada es buena" Dice un antiguo refrán castellano, ya que se le consideraba poco sustancial y de gusto insulso.
"La berenjena ni sacia, ni llena" Haciendo alusión a que necesitas muchas berenjenas para hacer una comida en condiciones.
"Nunca de mala berenjena se hizo buena calabaza" Resaltando que con malos principios no se llega a buen fin.
Incluso se la ha llegado a considerar venenosa, cosa totalmente infundada, ya que posee un alcaloide, la solasonina, pero en cantidades demasiado bajas para tener efecto tóxico. Los ingleses decían que producía locura, por lo que la denominaban "manzana loca".
De todas formas el refrán más conocido y usado es: "Meterse en un berenjenal" refiriéndose a meterse en complicaciones y líos insalvables, ya que la planta de la berenjena es de tallos rastreros, recios y espinosos.
A mi particularmente me encanta la berenjena, ya sea frita, rebozada, rellena o gratinada. En Málaga hacen una fritura de berenjenas, pimientos y gambas que "quita las tapaderas del sentido".
¡Pobre berenjena... tan rica, tan buena!
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