Los relojes que tienen su limbo, (esfera), marcados con números romanos, suelen emplear preferentemente IIII, en lugar de IV, para indicar el número 4. Esta tradición viene de muy antiguo y es usada, en los relojes de sol, desde tiempos muy remotos. Posteriormente pasó a los relojes mecánicos y sigue empleándose sin que nadie sepa, a ciencia cierta, el origen de esta costumbre.
Entre los aficionados a la gnomónica suelen darse muchas explicaciones, entre las que están:
- IV son las iniciales de Júpiter, (IVPITER), por lo tanto, en la antigüedad, se consideraba irreverente su uso y preferían IIII.
- El número IV está en una posición, (casi boca abajo), que sería difícil de leer.
- Cuestión de estética. Los cuatro primeros números usan exclusivamente la I, los cuatros siguientes incluyen la V y los cuatro finales usan la X.
Y así podría enumerar un sin fin de explicaciones, ya que no deja de ser curioso que se cometa esta falta, intencionadamente, en el uso del cuatro.
Lo más probable, (siempre me han gustado las explicaciones sencillas), es que los antiguos no fueran tan "puristas", como nosotros, y admitieran tanto IV como IIII. Además, no me negaran ustedes que es mucho más expresivo IIII.
Sea como fuere, el uso de la forma IIII, está ampliamente difundida y entre los relojes más famosos de España, que la utilizan, está el de la Puerta del Sol de Madrid. Aquí te dejo su imagen, por si no te habias fijado anteriormente.
Fuentes: Wikipedia, Las mil historias, El Buscador Que!
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